España no va nada bien

Unos nos venden (PP) el rollito de que estamos saliendo de la crisis. Lamento decirles que las cifras oficiales están manipuladas, como bien ha puesto de manifiesto el insigne economista Roberto Centeno. En la Unión Europea lo saben, pero se callan, porque mientras España pague religiosamente a sus bancos la deuda pública, el sufrimiento del pueblo español les importa un pimiento.

Otros quieren reventar el sistema (IU, Podemos e independentistas) quieren reventar el sistema, pero al mismo tiempo quieren seguir chupando del sistema. Unos dicen «España nos roba» (y nosotros no robamos nada) y otros «hay que acabar con la casta política» (pero de acabar con el disparate de las duplicidades autonómicas, organismos inútiles, de eso, nada de nada).

Y otros (el PSOE) quieren seguir haciendo lo que han hecho toda la vida: vivir del sistema. y el problema es que no saben a quien arrimarse, a unos o a otros.

Más allá de las tonterías que dicen estos «artistas», vamos a analizar las cifras. Si eres español, te interesa, y si no lo eres, también, porque como reviente la burbuja económica española…

 

La economía de España es sumamente frágil

Con el consumo paralizado, con un gasto público disparado (y no por los funcionarios, sino por los políticos y la corrupción), ahogados por impuestos, es imposible crear empleo. Es algo claro y simple de curso elemental de Economía Política.

El mundo está saliendo de la terrible recesión de 2008 (que no sólo fue financiera, sino también alimentaria), pero la recuperación es sumamente frágil y hay que andar con pies de plomo.

En una economía globalizada, Europa y Estados Unidos están angustiados los signos de debilidad de la economía china. El Gobernador del Banco de España Luis Linde está obsesionado con la necesidad de aumentar capital en las entidades financieras.

 

España se hunde en la pobreza

Las medidas de Mariano Rajoy, traicionando su propio programa electoral y dictadas desde los poderes extranjeros internacionales, han aumentado de forma espectacular las desigualdades sociales.

En el índice de miseria, España está por delante de Grecia y Portugal:

Y a nivel mundial está en los primeros países (puesto 7):

España necesita medidas para paliar la pobreza de la población, no medidas para sanear cuentas. Eso está muy claro.

Si España tuviera un presidente patriota, claro está.

Postdata: del Índice de Gini no me apetece hablar. Mis lectores no se lo merecen.